INICIO > OPINION
A-  | A  | A+

Los celos de Trump

Hace una semana estábamos en vilo ante la amenaza de la instauración del arancel de 25 por ciento a las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos (EU). La amenaza sigue, pero se abrió un mes de espacio para impedir que la decisión se aplique.

Más de allá las complicaciones en las relaciones México-Estados Unidos por la migración y el tráfico de drogas, quisiera centrarme esta vez en una frase de Trump, en la víspera de las llamadas con Sheinbaum y Trudeau: “México y Canadá nos deben mucho dinero”. ¿A qué se refiere?

Desde su primer mandato, Trump ha insistido en el déficit comercial que tiene EU ante México, Canadá y China. En efecto, estos tres países le venden mucho más de lo que le compran y nuestro vecino del norte es la economía más deficitaria del planeta.

Centrémonos en México: tomando sólo los resultados de la nuestra balanza comercial de noviembre pasado, dividí la información entre aquellos países con los que tenemos saldo deficitario (compramos más de lo que vendemos) y aquellos con los que tenemos superávit (vendemos más de lo que compramos). México es deficitario con 143 países y superavitario sólo con 61. Entonces, ubiqué aquellos países en donde se concentran nuestros superávits y déficits.

Resulta que 92.8 por ciento de nuestros saldos superavitarios se concentran sólo en los EU, seguido de Canadá con 2.9. Con ningún otro país nuestro saldo positivo alcanza ni uno de nuestros superávits totales. Nuestro tercer gran cliente es Guatemala, que representa tan sólo 0.75.

Del lado de los déficits, la lista la encabeza de muy lejos China, 41.1 por ciento de nuestros déficits totales, seguida de Taiwán (7.35), Corea del Sur (6.2) y Japón (5.2). Le siguen Vietnam y Malasia. En séptimo lugar entre el primer europeo (Alemania) y después Tailandia, Italia, India, Brasil, España y Filipinas. Nueve de los 14 países con quienes tenemos un déficit significativo son asiáticos.

¿Qué significan estos datos? Que México vende masivamente a los EU y, con los dólares que obtiene de excedente, compra muy significativamente productos asiáticos, especialmente de China, el principal competidor y adversario económico de los EU. Nos gastamos con China los dólares que conseguimos de EU. Como que eso no le gusta mucho a Trump.

Lo lógico sería qué si México le compra masivamente a China y luego a Taiwán, Corea, Japón, Vietnam, Malasia, Tailandia, la India y Filipinas, entonces México redirigiera sus exportaciones hacia Asia. Sólo entre los países que acabamos de mencionar se concentra alrededor de 40 por ciento de la población mundial. Sin embargo, eso no es posible, pues México es el principal dependiente económico y geopolítico de los EU, y no podemos zafarnos en el corto plazo de esa condición. De hecho, en el TMEC está prohibido establezcamos algún acuerdo de libre comercio con China.

Pese a lo anterior, en términos de precios y de poder de compra de los mexicanos, resultaría imposible adquirir en productos norteamericanos lo que adquirimos de Asia. Quedamos entre la espada y la pared, y tanto con los EU como con China, tenemos el problema clásico de las parejas en pleito: ni contigo, ni sin ti.

[email protected]

jl/I